enero 30, 2008

Charlie cara cortada

Becky sabía como ser coqueta. Era ágil y vivaz como una serpiente y se traía una figura envidiable: piernas largas, pelo marrón, trasero firme y redondo (para lamerlo como a una golosina), tetas duras y provocativas. Charlie, un tipo cualquiera de aspecto misterioso y demente.
Cuando Becky vio a Charlie por primera vez, se inventó de inmediato una vida para él, lo cual la hizo interesarse más. Charlie ya sabía a qué atenerse. Siempre tuvo suerte con las mujeres en un principio (parecía una estrella de rock desarraigada y melancólica), pero luego lo dejanban como a un trasto roto y decepcionante.
Becki se las ingenió para que Charlie terminara invitándola a salir, y de ahí, a los cuatro días se citaron para verse en un bar.
Llegados al bar, pidieron un par de cervezas y Becki esperó a que Charlie le contara algún episodio interesante o le hiciera una propuesta demente. En su lugar, Charlie preguntó lo típico "cuantos años tienes", "a qué te dedicas" hizo alguna broma insegura y se quedó callado. En ese momento, vio que Becky lo miraba con cierto aire aburrido y decepcionado y pensó
-es igual que todas. Bien, la haré vivir, le daré una emoción-
Entonces agarró la botella del pico y con un espléndido movimiento le quebró una parte, dejando en la otra unos dientes de vidrio filudos y terribles.
-Sabes Becky- dijo Charlie- te daré algo interesante- y sonrió con sarcasmo.
En eso, se llevó la botella dentada a la cara y empezó a revanársela mientras Becky gritaba histéricamente y la gente miraba estupefacta el sangriento espectáculo.
Charlie no fue siempre un caradura con el rostro machacado y lleno de cicatrices horrendas. Ahora ya no piensa en las mujeres. Se compró una máquina de escribir.

Hey- the pixies

Explicar una peteada dentro y fuera de una chica

Siento este borde y este límite. Lo siento volcarse violentamente como una ola sobre mi cuerpo. No es nada espacial ni mucho menos. Tal vez se parezaca a un relámpago violeta, a una explosión electrica neuronal, progresiva, rápida (tormenta electrica autocontrolada- Llinás). Pero mejor dejo cada sensación con su propio lenguaje . Las palabras me sirven para jugar y atormentar y para otras cosas, pero nada más. Es lanzar vacíos, transparencias, un puente de cristal por donde pasan ondas punsantes, a ver si la sensación se propaga. Pero nada más. Cada cosa con su lenguaje. Estoy seguro que si te esfuerzas ya no tendré que describirte lo que siento, estaremos hablando en silencio, gritando.

enero 02, 2008

Como no saber que decir cuando más se necesita (remix)

Hablar de los grandes y de los menos, de Dios, del diablo, de kant, de page, de la vida y de la muerte, devanarse los cesos sobre el engima y el misterio, el arte y de más y de más, me sabe a lo mismo que hablar sobre la vecina, sobre el perro o sobre un libro cualquiera. Sólo necesito un poco de emoción para hacer de una cagada una experiencia profunda. Mi único problema radica en que estoy entrenado para pensar y sentir ciertas cosas (a eso se dedicaron arduamente muchas personas, dentro de éstas, mi puto colegio) pero ahí voy, tratando de lidiar con tanta mierda que me atora (a veces me siento como un bollo atorado que quiere salir pero no puede), para no perder el interés por la vida, para pelear por ella.
Let there be more light - Pink Floyd 1968

Como no saber que decir cuando más se necesita

Tal vez las palabras
sean lo que más me separa
lo que más nos separa
y digo !mierda!! cómo pudiste sentir eso
como para decir algo así!
!para destruir así!
!para que te creyeran así!
!para quedar tan mal plantado!
Lastimosamente las cosas están dadas
para que el silencio fracase
y siempre haya que decir algo innecesario,
algo hueco, un vacío que abra
más el abismo que nos separa
y luego preguntarme como ahora
si dije exactamente aquello
que quería decir o si por falta
de las mismas palabras,
fallé de nuevo.

Simpathy for the devil - The rolling stones